...En el bosquecillo de la Porciúncula, los hermanos le llevaron a su requerimiento, a una choza aislada, oculta detrás de la Capilla.
Cuando sus amigos y fieles estuvieron reunidos a su lado y sintió que sólo le quedaban unas pocas horas de vida, volvióse al cordero de Dios y le dijo:
-Añade esto a lo que te pedí que escribieras en Siena. Suplico a los hermanos seglares, lo mismo que a los sacerdotes, que no interpreten mis palabras y no digan "esto es lo que dió a entender".
Y lo mismo que me ayudó el Señor a establecer y escribir las reglas y estas palabras simple y llanamente, del mismo modo debeis de entenderlas simple y llanamente, sin sentido interpretativo y seguirlas hasta el fin de la observancia.
Luego pidió: "Extended mi cuerpo desnudo sobre el suelo raso, pues asi en brazos de mi querida Señora Pobreza quiero morir"
Poco después, a la puesta del sol del 3 de Octubre del año 1226, llegó su última hora. El hermano de la vida y el hermano de la muerte, el hermano de la creación entera y su poeta inmortal, falleció. Sus postreras palabras fueron las del salmo de David: "Grité al Señor con mi voz; con mi voz elevé mi súplica al Señor"
Cuando su voz se debilitó y, por último, se desvaneció con la muerte, del bosquecillo llegó un ruidoso gorjeo de pájaros. Los hermanos de Francisco, las alondras, habian venido a decir adiós a su alma en su último viaje hacia el cielo.
-René Fülöp-Miller-
ooooo00000ooooo
Dicen que Francisco frecuentemente repetía..."el Amor no es amado, el Amor no es amado"...el busco la forma más plena de amar a ese Amor... y fue amando a todos, dándose a todos...olvidándose de sí.
ResponderEliminarGracias LAH, me ha encantado encontrarme tambiñen aqui con San Francisco.
Me alegra mucho de que de su mano vuelvas a publicar.
Un abrazo.
Todo lo que encuentro hoy en la red sobre San Francisco, me llena de gozo. La Iglesia estaba en un momento muy difícil cuando Dios regaló este santo para darle el aliento que necesitaba.
ResponderEliminarUn beso
¡Qué decir del santo de mi marido! Que lo adoro y le pido que lo ampare siempre como las alondras hicieron con él.
ResponderEliminarGracias, Lah, un besazo.
A mi todo lo que leo de este gran hombre y mayor Santo, hace que se me ponga la carne de gallina. Que forma tan bonita de vivir, que vida tan bien aprovechada. Bendito sea Jesucristo que se manifiesta y hace de vidas como la de San Francisco todo un camino de indicaciones hacia Dios.
ResponderEliminarun beso Lah.
Que coincidencia Lah!....Nuestro Padre San Francisco, como lo llama mi padre......A El le pido el Amor a la Pobreza, me siento muy pobre sin este Amor en Mi y por esta Gracia estoy muy agradecida. un beso.
ResponderEliminarHoy con el ejemplo de s. Francisco entendemos mejor, el comentario que hace unos dias publicaba Angel, sobre el evangelio la ancianita que depositó todo lo que tenía. S. Francisco nos demostró Que cuando encontró a Jesús, descubrió el Amor tan grande que nos tiene Dios; entregó todo absolutamente todo, se entrego él, por un motivo, para que nada ni nadie le separara del Amor de Dios, así pues quedo liberdo de todo, y desde esta libertad de todo. pudo dedicarse a alabar y bendecir las grandezas de Dios. "Bienaventurados los pobres de espíritu por que ellos verán a Dios" Elpidio
ResponderEliminarBuenos días LAH.Uno de los más grandes por pequeño.Un abrazo.
ResponderEliminarAyer estuve leyendo sobre su vida. Me impresionó este pasaje y que en su juventud hubiera sido una persona tan diferente. La misericordia por los pobres y leprosos le llevó a esa transformación. Supo escuchar lo que Dios le pedia y fue su fiel instrumento.
ResponderEliminarHola Lah bonita entrada dedicada a San Francisco.
ResponderEliminarUn saludo.
Recuerdo la impresión que me causó la Porciuncula... Tan, tan, tan pequeña... para alguien tan grande!
ResponderEliminarEntrañable santo
ResponderEliminarPreciosa entrada
Miriam