LOS REYES NOS ESCRIBIERON UNA VEZ...

 

 Cuando éramos  pequeños y en la edad de enterarte de cosas en el colegio... recibimos una carta preciosa cerrada con lacre rojo, con nuestros nombres y en el remite se leia: "Melchor Gaspar y Baltasar...  Oriente", una carta preciosa creada por mi padre,  con purpurina de oro  y "letra de reyes" decia yo...¡imaginaros la ilusión que nos hizo! en ella nos decian muchas cosas pero principalmente hicieron hicapié en una: que no hiciéramos ni caso si algún niño del cole decia que ellos no existian...

 Pues fueron si, una vez sólo a Belén, pero que todos los años el Espiritu hacia  que todos los niños recibieran regalos conmemorando aquella noche, ¡como si fueran millones y millones de Niños Jesús! los papás eran como los pajes...

Nos  sentiamos los niños mas afortunados del mundo, porque no era muy común recibir este tipo de correspondencias, un dato más para creer absolutamente que los Reyes existian de verdad!

Esta carta  la guardo como una reliquia de aquella noche, que  volví en su momento a reproducir, cambiando los nombres para nuestros hijos y sobrinos.

Esa noche la recuerdo perfectamente, ibamos todos con los primos, por la tarde a un convento de monjitas  donde cantábamos villancicos y nos daban dulces, a la vuelta recuerdo ir por una calle con el frio de este mes y ese olor que siempre se queda dentro, - pues aún hoy cuando vuelvo allí sigue ese olor que te transporta a aquel tiempo..los olores no cambian nunca- y deciamos ¡huele a Navidad! y recuerdo que miré al cielo y vi la estrella...imaginación? sugestión? no lo sé  pero yo vi aquella Estrella con su estela transparente allá arriba muy alta...

Son recuerdos que se viven de nuevo al recordarlos.

Los años pasan y yo sigo pidiendo a los Reyes muchas cosas, y esa noche no pierde ni una pizca de ese misterio para mi, ya no vienen bicis, ni muñecas etc, vienen otras cosas acordes con la madurez, para mis hijos para nosotros,  pero nunca nunca deja de perder ese misterio, el Espiritu que decia aquella carta sigue presente ahora. 

Es noche de Contemplación de Adoración, de Admiración..y por supuesto... ¡de sorpresas! 

(Perdonadme si me he adelantado un poco con este tema, si aun no ha nacido el Niño. Pero cuando me vienen las ideas las plasmo en el momento.)
                                                            ¡Que Dios os bendiga!