NUESTRO AYUNO

El culto al cuerpo se convierte casi en una religión.

El deporte es estupendo, (espero que no se me malinterprete), hago referencia a aquellos que se machacan literalmente el cuerpo, llegando a a la obsesión, como si de ellos dependiera añadir un segundo más en su vida, un guiño al tiempo

Esto puede llegar a ser obsesivo, yo lo veo en mi entorno, pues vivo en una zona amplia de parques con grandes instalaciones deportivas.
Si con este mismo ímpetu se cuidara el alma, el número de santos iria cada dia en aumento!

Y no hablemos de las dietas, somos capaces de hacer lo que sea para conservar lo que el tiempo se lleva.

Pero para nosotros, independientemente del ayuno en la comida, creo que hay un ayuno mucho más importante, es el del corazón, ponerse en disposición todavia más a los demás, es decir ayunar a ti mismo, dedicarte a tu hermano todavia más, dedicandole todo el tiempo que puedas, ayunar a tus deseos, ayunar a tus pasiones y apetencias, para hacer sólo Su voluntad.
Este es el verdadero ayuno para nosotros. El pan y el agua para nuestra alma.

Esta es nuestra arma para vencer las tentaciones del desierto.

El Señor me regala una Cuaresma más, y viendo los acontecimientos tan tremendos que están pasando en Japón rezo mucho para que la Iglesia sea acogida de una manera abierta  en ese pais y pueda abrazar y consolar a sus doloridos hijos.

 El junto con su Madre están con nosotros todos los dias.