LA EUCARISTIA EN CIBELES.....

Acabamos de llegar y no tengo palabras para expresar la UNIÓN en Xto que he sentido... ha estado grandioso!

El calor....nada, las aglomeraciones.....nada, todo pasaba desapercibido en mi,

Sólo veia a jovenes italianos, franceses, indios, japoneses...en un mismo espiritu, contestando durante la homilia. Mis hijas estaban en la parte central como voluntarias del orden, se marcharon por la mañana y aun no han vuelto...las veia felices con los hermanos de su Cdad. (y yo, feliz)

Cuando hemos rezado el Padrenuestro en latín como lo cantaba Juan Pablo II me he emocionado muchisimo, porque él también se ha hecho presente, la homilia del Cardenal Rouco perfecta. Los cantos preciosos, en fin, todo ha resultado magnifico!

Cuando terminaba miles de jóvenes ocupaban las calles cantando y alegres, ésta es la alegria de Dios y esa alegria nunca muere...pensaba.

Ahora estoy haciendo la digestión! porque es mucho lo que se ha recibido alli, y todavia no ha hecho mas que empezar.

He estado en San José me han dado mi mochila y demás cosas. Iré el jueves desde las 14.00 h. hasta las 17.30 h. y después me voy corriendo para Cibeles y esperar a nuestro Benedicto XVI.

 Os pongo el resumen del saludo dado a los jóvenes de la JMJ el 16/8/2011 en la misa inaugural de Madrid, del cardenal Rylko:

"En estos días la fe estará en el centro de nuestra reflexión; porque la fe es un factor decisivo en la vida de cada hombre.

¡Si Dios existe o no existe, todo cambia!

La fe es la raíz que nos
nutre con la savia vital de la Palabra de Dios y los sacramentos; es el
fundamento, la roca sobre la cual construir la vida, la brújula segura que guía
nuestras decisiones y da a nuestra vida la orientación
decisiva.

Sin embargo, muchos hoy se preguntan: en nuestro mundo, que tan a menudo rechaza a Dios y vive como si Dios no existiera, ¿es aún posible la fe? …
“sí”! “Si”, ¡la fe es posible!

Es más, es una aventura maravillosa que nos permite descubrir toda la grandeza y la belleza de nuestra vida.

Porque Dios, que se ha revelado en el rostro de Jesucristo, no disminuye al hombre sino que lo enaltece mas allá de toda medida, mas allá de toda imaginación!

En estos días, junto con los Apóstoles, queremos todos gritar al Señor: «¡Aumenta
nuestra fe!» (Lc 17,5)

¡No tengáis miedo!

¡Optar por Cristo en la vida es adquirir la perla preciosa del Evangelio por la cual vale la pena darlo todo!"

Aquí está completo todo lo que dijo:

http://www.revistaecclesia.com/content/view/28306/324/

      ....Y el jueves os contare más!                          

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